🎸 Jeff Beck – "Suspension"
💿 You Had It Coming (2000)
En medio del vendaval sónico que representa el álbum You Had It Coming, Jeff Beck se toma un respiro para entregarnos una pieza profundamente atmosférica y emocional: "Suspension". Esta canción, casi oculta entre los riffs pesados y los ritmos electrónicos del disco, es una joya que muestra el lado más introspectivo y etéreo del guitarrista británico.
"Suspension" es un viaje minimalista, donde la guitarra no busca imponerse, sino levitar. Beck abandona toda estridencia para explorar un espacio lleno de silencios, ecos y notas suspendidas en el aire. Cada nota parece meditada, cada vibrato tiene un peso emocional que trasciende lo técnico. No hay prisa, no hay necesidad de demostrar nada: solo el sonido flotando como una meditación.
En esta pista, Beck demuestra su maestría no con velocidad ni complejidad, sino con expresividad y sensibilidad. Es como si su guitarra respirara, como si cada acorde fuera una exhalación lenta en medio de una pausa vital. El efecto general es hipnótico, casi cinematográfico.
You Had It Coming es el octavo álbum de estudio de Jeff Beck, lanzado en 2000 a través de Epic Records. El disco alcanzó los puestos 17 y 110 en las listas Billboard Top Internet Albums y Billboard 200, respectivamente, así como los puestos 96 en Alemania y 123 en Francia. Su canción "Dirty Mind" fue reconocida con el Grammy a la Mejor Interpretación Instrumental de Rock en 2002, siendo el tercer galardón de Beck tras Flash (1985) y Jeff Beck's Guitar Shop (1989). La vocalista Imogen Heap colabora en “Dirty Mind” y en “Rollin’ and Tumblin’”, y posteriormente acompañó a Beck en su gira de 2004.
Este álbum llega solo dos años después de Who Else?, un disco que, en contraste, tardó una década en concretarse. You Had It Coming no solo sorprendió por su rapidez de publicación, sino por su sonido. Desde el primer segundo, con los ritmos electrónicos post-rave de "Earthquake", queda claro que Beck no piensa quedarse anclado al pasado. Siempre ha sido un camaleón sonoro, capaz de abrazar el metal crudo en Truth, la fusión jazzística en Blow By Blow o el rock tecnificado en Guitar Shop. Aquí da otro salto: abraza la electrónica, a veces ruidosa, a veces cercana al new age introspectivo.
Es cierto que en algunos momentos su guitarra queda casi envuelta entre capas de producción digital, lo que le resta protagonismo en comparación con sus mejores obras. Pero también hay que reconocerle el mérito: Beck siempre ha tenido un sonido que parece venir de otro planeta, y aquí busca un nuevo terreno donde expandirlo. Aunque no suene a un "típico" disco de Jeff Beck, no deja de ser un trabajo valiente y, en muchos aspectos, fascinante.
En ese contexto, "Suspension" se erige como una pequeña catedral en medio de un paisaje de concreto: etérea, contemplativa, profundamente humana.
.jpg)
.jpg)
Comentarios
Publicar un comentario