Mike Oldfield - Guitars - Cochise - B. Blue






 

 

Mike Oldfield y Guitars: un giro íntimo hacia la esencia de las seis cuerdas

Guitars es uno de esos discos que a menudo quedan en segundo plano dentro de la vasta discografía de Mike Oldfield. En esta obra, Oldfield se apartó de los sonidos más relajados de trabajos anteriores, tal vez liberándose de las presiones comerciales para reencontrarse con la esencia de su música. Decidió centrarse exclusivamente en la guitarra, su instrumento por excelencia, encerrándose en el estudio para explorar cada rincón de su creatividad.

El resultado es un disco sincero, que arranca y culmina con fuerza, aunque atraviesa algunos pasajes menos inspirados. Sin embargo, los dos primeros temas, el delicado Muse y el eléctrico Cochise, destacan con luz propia. Estas piezas encapsulan la esencia de un álbum sin grandes pretensiones, pero construido con la maestría y dedicación que siempre han caracterizado a Oldfield.

En 1999, Mike Oldfield, siempre inquieto y dispuesto a reinventarse, lanzó Guitars, un álbum que representó un cambio de rumbo en su estilo. Conocido por su meticulosa producción y el uso de múltiples instrumentos en discos icónicos como Tubular Bells o Ommadawn, esta vez Oldfield optó por una aproximación más minimalista, utilizando únicamente guitarras para construir todo el paisaje sonoro del álbum.

La decisión de limitarse a las guitarras (eléctricas, acústicas, MIDI y de varios tipos) no redujo la riqueza de la composición; al contrario, le permitió explorar a fondo las posibilidades expresivas de su instrumento principal. Cada capa melódica, cada textura, fue cuidadosamente esculpida a través de las seis cuerdas, creando atmósferas que van desde lo introspectivo hasta lo enérgico.

            

Cochise: fuego y dinamismo en estado puro

Uno de los momentos más vibrantes del disco es la canción Cochise. Con un ritmo impulsivo y un riff principal que recuerda a un galope desbocado, Oldfield evoca la figura del legendario líder apache que da nombre a la pieza. Las guitarras eléctricas rugen con fuerza, creando una sensación de libertad y valentía, como si estuviéramos cabalgando por vastos paisajes del oeste americano.

A través de solos vertiginosos y cambios dinámicos, Oldfield transmite una energía cruda que contrasta con otras piezas más contemplativas del disco, mostrando su capacidad para balancear distintos estados de ánimo dentro de un mismo trabajo. Cochise es, en esencia, un homenaje a la fuerza indómita del espíritu humano, encapsulada en un torbellino de cuerdas y distorsión.

            

B. Blues: la esencia del alma en las cuerdas

En B. Blues, Oldfield nos transporta a las raíces más profundas del blues, pero con su inconfundible sello personal. La pieza se construye sobre una estructura sencilla, con un fraseo melódico que va creciendo poco a poco, como si el propio guitarrista estuviera improvisando en una sesión íntima.

Las guitarras lloran y suspiran con cada nota, con bendings emotivos y vibratos que destilan pura sensibilidad. Oldfield no necesita virtuosismo desmedido para transmitir emociones; su expresividad se manifiesta en los matices, en los silencios, en la manera en que deja respirar cada acorde.

La canción parece ser un homenaje a los grandes guitarristas de blues, pero también es un reflejo del propio viaje interior de Oldfield, explorando las raíces del género para encontrar una voz auténtica y cercana. Es una pieza que, aunque discreta, encapsula a la perfección el espíritu libre y emotivo que impregna todo el álbum.

Un álbum que desafía las expectativas

Guitars puede no ser el disco más conocido de Mike Oldfield, pero es una muestra palpable de su genio creativo. Al limitarse a un solo tipo de instrumento, logró expandir los límites de su propia música, regalándonos un viaje sonoro que, sin palabras, nos habla directamente al alma.



Comentarios