Blind Faith - "Presence of the Lord"

    

       

      Eric Clapton & Stevie Winwood Live Madison Square Garden

      

 

"Presence of the Lord": Un himno de espiritualidad y maestría musical

La canción "Presence of the Lord" es una de las piezas más memorables del supergrupo Blind Faith, formado por leyendas de la música como Eric Clapton, Steve Winwood, Ginger Baker y Ric Grech. Este tema es un testimonio de la genialidad compositiva y la profundidad emocional que cada uno de sus integrantes aportó al breve pero impactante legado de la banda.

La compleja trayectoria de Eric Clapton

Hablar de Eric Clapton es hablar de uno de los músicos más influyentes en la historia del rock. Su trayectoria es tan diversa como impresionante. Formó parte —y en algunas ocasiones lideró— de grupos fundamentales como The Yardbirds, John Mayall & The Bluesbreakers, Cream, Blind Faith, Delaney & Bonnie o Derek and The Dominos, sin olvidar su excepcional carrera en solitario, que consolidó su estatus como uno de los mejores guitarristas de todos los tiempos.

Blind Faith nació en 1968, tras la disolución de Cream. La banda estuvo formada por Clapton y Ginger Baker —también provenientes de Cream—, Steve Winwood de Traffic y Ric Grech de Family. Aunque el supergrupo duró menos de un año, dejó una huella imborrable en la historia de la música con su único álbum homónimo, "Blind Faith". Este disco, esencial para los amantes del rock psicodélico y el blues-rock, incluía una portada controvertida: la imagen de una adolescente semidesnuda sosteniendo la maqueta de un avión en sus manos. A pesar de la polémica, el contenido musical del álbum ha trascendido como un clásico atemporal.

"Presence of the Lord": la joya del álbum

En este álbum se incluye la inspiradora "Presence of the Lord", un tema compuesto por Eric Clapton que refleja su búsqueda de paz espiritual en un periodo de cambio personal. La canción comienza con el suave y reverencial órgano de Steve Winwood, creando un ambiente casi litúrgico. La voz de Winwood, apasionada y conmovedora, dota al tema de una profundidad única. Sin embargo, el punto culminante es el solo de guitarra de Clapton, considerado uno de los momentos más emotivos de su carrera, con una ejecución que transmite tanto vulnerabilidad como esperanza.

Con el paso de los años, "Presence of the Lord" se ha convertido en un tema recurrente en el repertorio en solitario de Clapton. Sin embargo, y a pesar de ser un verdadero clapton-maniaco, considero que esta primera versión de Blind Faith, enriquecida por la irresistible voz de Winwood, sigue siendo inigualable.

Una vida de altos y bajos

Clapton no solo ha sido un virtuoso de la guitarra, sino también un hombre que ha enfrentado innumerables demonios a lo largo de su vida: la heroína, el alcohol y las mujeres marcaron muchos de sus años de juventud y madurez. “Es difícil ser creyente cuando estás en una borrachera”, afirmó en una ocasión. No estás buscando la salvación espiritual cuando buscas tu próximo subidón, y ciertamente no eres alguien que inspire a otros en ese estado.

Tras veinte años de vivir en una montaña rusa, Clapton tocó fondo en 1987. En su autobiografía, relata un momento clave mientras estaba en una unidad de rehabilitación:
"Estaba completamente desesperado. En la privacidad de mi habitación, supliqué ayuda. No tenía idea de con quién pensaba que estaba hablando, solo sabía que había llegado al límite de mi paciencia... y, poniéndome de rodillas, me rendí. En pocos días me di cuenta de que había encontrado un lugar al que recurrir, un lugar que siempre había sabido que estaba ahí, pero en el que nunca había querido o necesitado creer. Desde ese día hasta hoy, nunca he dejado de orar por la mañana, de rodillas, pidiendo ayuda, y por la noche, para expresar gratitud por mi vida y, sobre todo, por mi sobriedad. Elijo arrodillarme porque siento que necesito humillarme cuando rezo, y con mi ego, esto es lo máximo que puedo hacer. Si me preguntas por qué hago esto, te diré... porque funciona, así de simple.”

Este acto de rendición y humildad no solo salvó su vida, sino que también revitalizó su conexión con la música, dando lugar a algunos de los momentos más introspectivos y espirituales de su carrera.

Un legado que trasciende

"Presence of the Lord" no es solo una canción; es una declaración de fe, no necesariamente religiosa, sino una fe en la posibilidad de encontrar refugio y sentido en medio del caos. Blind Faith, aunque efímero, nos dejó esta obra maestra como un legado que sigue resonando profundamente en los corazones de quienes buscan algo más en la música: una conexión con lo sublime